
Lugar: Sala Burnao
Precio: gratis con tu entrada al castillo
Una exposición que invita a explorar el tren no solo como medio de transporte, sino como un símbolo de movimiento, transición y alma humana. Es un viaje en el tiempo a través de recuerdos y vivencias del pasado ferroviario español del siglo XX.
A lo largo de los años, el tren ha representado el progreso, la esperanza y el avance. El tren tiene un alma singular, es una filosofía de viajar. Es imagen y viajero. En sus andenes y vagones han ocurrido miles de historias reales o literarias. Ha sido icono preferido de escritores, cineastas y pintores.
Cada estación es un paso en el trayecto hacia un nuevo destino y cada vía, un camino que puede ser tanto claro como incierto. Este universo de trenes, railes y estaciones nos habla de los altibajos de la existencia, de las despedidas y los reencuentros, de los momentos de soledad en el trayecto y la conexión con otros pasajeros en el camino.
En esta exposición, el artista proyecta su mirada hacia el pasado, a través de estaciones y ambientes ferroviarios desaparecidos. Una selección de pinturas en las que el tren se convierte en una metáfora de la vida misma, un viaje continuo entre lo conocido y lo desconocido, entre el cuerpo y el alma.